En Roberto Camacho García habita la sabiduría del tiempo. Un hombre entregado a la historia, cultura y evolución del terruño.
Durante décadas ha estado inmerso en peñas, tertulias, proyectos sociales, trabajos investigativos y eventos de gran repercusión.
Es una fuente inagotable de conocimientos, un faro de referencia y consulta constante.
Hasta su casa arriban periodistas, alumnos universitarios, bibliotecarios, especialistas del museo, todos en la búsqueda de respuestas a múltiples temas.
Su presencia en las calles mineras anuncia intelecto, consagración. Es una personalidad indiscutible de la tierra del cobre.